Dirigida por Wim Wenders y Juliano Riebeiro Salgado, esta película nos muestra la impactante obra fotográfica de Sebastiao Salgado, el fotógrafo aventurero que recorrió el mundo durante 40 años para dar testimonio de algunos de los acontecimientos más importantes de su época: las minas de oro de Sierra Pelada (Brasil) en las que decenas de miles de hombres extraían a mano el oro, escenas que le remitían a las minas del Rey Salomón o a la Torre de Babel (ver imágenes); el conflicto de la antigua Yugoslavia; la guerra de Ruanda entre tutsis y hutus y el éxodo de 250.000 personas abandonadas a su suerte; las hambrunas de África; las tribus primitivas de Papúa Nueva Guinea; las morsas y los osos del Ártico; el mar de Siberia Oriental; los gorilas de África; las Galápagos con las tortugas que convivieron con Darwin y las iguanas.
«Las personas son la sal de la tierra» y Salgado ha buscado al hombre en sus innumerables viajes por el mundo y el tiempo, fotografiando lo que veía desde su mirada sensible, profundamente humana. Y ha constatado la conexión del hombre con la naturaleza a la que pertenece. Y que muchos territorios permanecen vírgenes.
En la etapa más reciente de su obra destaca su preocupación por el medio ambiente, por la destrucción de los bosques y las selvas tropicales, la contaminación de los océanos, y su lucha por intentar, junto a Leila, su mujer, revertir ese proceso de destrucción.
La obra de Salgado es un homenaje al planeta, que todos estamos llamados a conservar, y una apuesta por la esperanza a pesar de tanta violencia y destrucción. Ver fotos de Salgado en este enlace.
