Cumbre de la OTAN en La Haya

Trump y Rutte

Se celebra el 24 y 25 de junio la cumbre de la OTAN en La Haya, en la que destaca el objetivo de aumentar el gasto en defensa de los miembros (Trump impone a sus socios un 5 % del PIB, superior a la contribución de EE.UU., que es del 3,38 %, sin que se hayan concretado los objetivos de ese aumento del gasto) y la oposición de Pedro Sánchez a dicho porcentaje porque es arbitrario e incompatible con el mantenimiento del Estado de bienestar. En su lugar está dispuesto a llegar al 2,1 %. Todo parece indicar que Trump persigue fortalecer la industria militar de EE.UU. vendiendo armamento a los países de la OTAN.

Así lo comenta Andrés Gil en elDiario.es: «Cuanto más gasten en defensa los miembros de la OTAN, más compradores tendrá la industria armamentística estadounidense, más empleos se generarán en EEUU y más mejorará la balanza comercial estadounidense con respecto al resto, que es una de las principales obsesiones de Trump». Trump busca con este aumento del gasto militar de los demás, no solo aportar menos a la OTAN sino obtener esas otras ventajas. Se trata de un porcentaje arbitrario, que no se fundamenta en ningún análisis serio de las capacidades y objetivos que se quiere conseguir.

Las amenazas de Trump a España al decir que pagaremos el doble (¡a EE.UU.!) en el acuerdo comercial por no querer «pagar el 5 %» en Defensa revela cómo Trump considera el incremento del gasto militar de los países de la OTAN como un buen negocio para EE.UU.

El secretario general de la Alianza, Rutte, que se había mostrado de acuerdo, en una carta enviada a Sánchez, con dar a España una mayor flexibilidad en el gasto, dice luego que hay que llegar al 3,5 % en 2035. El aumento de las capacidades militares de los países se revisará en 2029. «España cree que puede cumplir sus compromisos sobre capacidades militares con un 2,1% del PIB en gasto en defensa, y Rutte cree que necesitará el 3,5%, así que se ha pactado que España tendrá flexibilidad para estudiar si puede cumplir y se revisará el cumplimiento en 2029»., recoge la información de El País sobre el acuerdo Sánchez-Rutte. Trump revela un mensaje privado de Rutte en que este le alaba por haber sido capaz de conseguir que los miembros aumenten su contribución a la Alianza.

Trump critica a España por su baja contribución al gasto militar y afirma que la OTAN tiene un problema con España (provoca un agravio comparativo a los demás miembros, que en su mayor parte aceptan el 5 % a pesar de la dificultad que hay para conseguirlo). Amenaza con no defender a aquellos países que no alcancen el porcentaje. Y con hacer pagar más a España en el terreno comercial. Otros países se han manifestado también molestos con la posición de España y solo dos (Bélgica y Eslovaquia) han manifestado también sus reticencias al 5 %. Trump lleva mal que le lleven la contraria.

Hay la sensación de que más países ven también imposible llegar al 5 % en una década (desglosado en un 3,5% en gasto de defensa y un 1,5% en seguridad interior y resiliencia nacional), pero no lo han manifestado abiertamente. 25-6-2025. Enlace.

En 2014, los miembros de la OTAN decidieron subir ese gasto al 2% del PIB y hacerlo en diez años. Ocho años después, sólo siete países llegaban a ese nivel. Veintidós estaban por debajo. Si no hubiera sido por la invasión rusa de Ucrania, muchos se habrían quedado sin alcanzar el 2% en 2024, dice Sáenz de Ugarte. 

Los socios de izquierda del gobierno de Sánchez se oponen al aumento del gasto en Defensa y el presidente ha asegurado que no afectará al gasto social. Podemos, incluso, pide que España salga de la OTAN.

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