Vive en su casa en el campo, no en la residencia presidencial. No tiene personal de servicio que le asista. «Estoy viviendo como la mayoría de la gente en mi país, no como la minoría poderosa». Utiliza un coche y un móvil antiguos. El grueso de lo que gana va para un plan de viviendas para mujeres pobres que promueve. «Con el sueldo de mi mujer tenemos bastante, unos 2.000 dólares».
Estas son algunas de las ideas que José Mugica, Presidente de Uruguay, un presidente atípico, expresó el domingo 18-5-14 en la entrevista que le hizo Jordi Évole en el programa Salvados, que batió a las demás cadenas en espectadores:
«El primer requisito en la política es la honradez intelectual, si no existe honradez intelectual todo lo demás es inútil. Hay que decir la verdad de lo que las cosas son».
«No quiero utilizar nunca más la palabra austeridad porque la prostituyeron en Europa. Austeridad es dejar a la gente sin trabajo. No, utilizo sobriedad: vivir con lo justo, lo necesario, lo imprescindible».
«Tenemos que revisar nuestra forma de vivir. Las fuerzas que el hombre ha desatado gobiernan al hombre, no las gobierna el hombre. No están al servicio de la felicidad del hombre».
Cuando gastas, lo que estás gastando es el tiempo de vida que te llevó ganar ese dinero que ahora gastas. Hay que utilizar el tiempo de vida en aquello que nos motiva, no en acumular cosas superfluas, pues se nos va la vida para nada.
«No he podido cumplir mi programa… He hecho algo, poco». «Infantilismo es confundir los deseos con la realidad». Reconoce con naturalidad y con un gran sentido de la realidad.
Puedes ver la entrevista en Información complementaria.
Y también puedes leer el artículo «La Europa infeliz», de Jordi Soler, 19-5-2014, El País. En este artículo el autor glosa la figura de Henry David Thoreau (1817-1862), escritor, filósofo, uno de los padres de la literatura estadounidense, naturalista, precursor del ecologismo y la desobediencia civil, que influyó poderosamente en Gandhi, Luther King y Tolstoy. Sus mejores obras son Walden y La desobediencia civil. Jordi Soler se pregunta en este artículo si Europa, que hoy se siente infeliz y pesimista ante el futuro, pese a haber alcanzado un nivel de vida como no existe en otras zonas del mundo, no ha tomado un camino equivocado. Algo en lo que coincide con José Mugica, Presidente de Uruguay, cuyo retiro en el campo se asemeja al de Thoreau en el bosque.